Teddy, 4,3/5. Sitges 2020

Películas de los directores Ludovic y  Zoran Boukherman.

Estos dos directores estudiaron en la escuela de cine de Luc Besson y es por eso que su película tiene un ligero aire a este director.

La película cuenta con el ganador de un oso de Plata en Berlín, por su actuación, Anthony Bajon.

Esta película fue seleccionada en la sección oficial de Cannes de este año.

Y como en toda película francesa que se precie, las escenas son cotidianas con sus pequeñas contradicciones psicológicas entre los diferentes personajes, con situaciones normales que al tratarlas de forma plana se convierten en cómicas, como por ejemplo que los padres de la novia no hagan caso cuando el novio está llamando a la puerta porque no le quieren ver, y este entra por otra puerta y sin ningún problema le miran y le dejan pasar viendo que la batalla está perdida. La confusión con el nombre en el monumento a los caídos en la segunda Guerra Mundial también fue un punto cómico.

No es una historia de terror  100%, es la historia de un chico sin estudios y que su única escapatoria es su novia que está a punto de acabar el bachillerato. 

En este relato, el que le muerda un lobo es anecdótico y que se esté convirtiendo en hombre lobo también. Cómo nos tienen acostumbrados las películas francesas, hay un transfondo, en este caso la lucha de clases sociales en la que el chico, que es una oveja inculta, es devorado por los lobos cultos, ricos, con poder, que no dudan en robar las novias o ir en busca del monstruo como ocurrió con Drácula.