The Castle, 3,5/5. Gijón 2020
El guión nos cuenta, desde los ojos de una joven lituana de 13 años, llamada Monika, sus experiencias tras llegar a Dublín. La joven vive con su madre Jolenta , y su abuela con demencia.
Jolanta es artista músical, pero tiene que trabajar en una factoría de pescado para poder sobrevivir. Junto con su hija hacen duetos esporádicos en fiestas o funerales. En uno de ellos, conocen a un hombre muy elegante que les invita a tocar para él en su castillo.
A partir de aquí Mónica no tiene otro sueño mas que tocar en el castillo, pero su madre se deshace del teclado musical con el que tocaba, por lo que será imposible ir al castillo.
La trama se centra en cómo la adolescente intenta obtener los 120 € que necesita para alquilar un teclado y poder ir a tocar. En esta búsqueda de dinero, Monika hace todo tipo de trabajos y lo que es más grave, comete una barbaridad contra su familia pensando que podría conseguir el dinero.
Es una película muy especialmente recomendable por la fantástica actuación de las 3 protagonistas:Barbora Bareikyte (adolescente), Gabija Jaraminaite (madre), Jurate Onaityte(abuela), está última, Jurate, me pareció algo fuera de lo normal, el cómo se mete en la piel de une persona con demencia.
Gracias a los ojos de la adolescente, de un color precioso, la directora nos cuenta la realidad que un niño no llega a ver, pero que comienza a descubrir. En este viaje, Monika descubre todas estas realidades incómodas e incluso participa en ellas para conseguir el dinero, sin darse cuenta que esto es parte del aprendizaje y de la madurez de una persona.
La directora utiliza la figura de la abuela con demencia, como una figura principal en la obra, ya que los cuidados que tiene que darle su hija, profundizan esa agonía que ésta tiene intentando tratar y cuidar a una persona de esas características.
Los vecinos son parte de la escena y nos muestran: o británicos peligrosos o lituanos muy caseros. Nos da cierto aspecto a la película "cat in the wall" dónde a veces las relaciones con los vecinos, en ese tipo de bloques, no eran muy afable.
Lo mejor de la película es la ilusión que tiene la niña por tocar en el castillo, lo que hace para conseguirlo y su actitud cuando ve la realidad. Con un final que muestra el apego de algunos inmigrantes con su tierra natal, algo sobre lo que, a lo largo de la cinta, ya vemos alguna pincelada.
Lina Lužytė, la directora de THE CASTLE, nos la presenta en este vídeo
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