Lua Vermella, 0,5/5. Cinespaña Toulouse 2020.

La película de la que todo el mundo habla, lo gana todo y que está presente en muchísimos de los festivales nacionales e internacionales. Una revolución que se adora o se odia, como las pasiones.

Ganadora absoluta del festival de Cinespaña Toulouse 2020: Palmarés.

Lois Patiño nos muestra esta película del nuevo movimiento gallego, en el que lo más importante es el paisaje y las escenas estáticas. El intentar hacer que la película interese al espectador para que no se vaya de la sala, pasa a un segundo plano.

En este caso, Luis utiliza filtros en casi todas las tomas, mostrándonos paisajes reales con una impresión fantasmagórica. Recuerda mucho al multipremiado documental "Slow Dead Ahead" de Mauro Here.

La historia cuenta de forma extremadamente lenta y repetitiva a nivel de paisajes y diálogos, la muerte de Rubio en un barco. Poco a poco los personajes se van convirtiendo en fantasmas, simplemente poniéndose una sábana blanca y quedándose quietos en el mismo sitio dónde estaban minutos antes sin sábana. 

Una voz en off narra algo sin mucho sentido sobre meigas y espíritus.

La película tiene una gran belleza visual con un guión algo parco, quizás no para competir en el festival de cine España en la sección de ficción, sino en la sección de documental o quizás en otro tipo de festivales con películas más experimentales, como el festival Traverse de Toulouse.

Esto mismo muchos espectadores no lo entendieron y a los 40 minutos ya habían salido de la sala unas 10 personas, con quejas de haber tirado el dinero de la entrada.

Si tenemos el cine como algo que atrae y que hace que el espectador se quede sentado aprendiendo algo nuevo, o reflexione sobre algo que ya sabía, esta Nueva Ola del cine gallego no sigue estas pautas. Este cine gallego no está para entender, sino para sentir, como una obra de arte, hay que dejarse llevar, dejarse transportar por sus experiencias de imágenes y sonidos sin mucha coherencia en ocasiones. 

Para esto, el espíritu, las ganas del espectador tienen que estar preparadas. Ver a unas personas de pie, quietas, en una nave con unas sábanas cubriendolas. Y volver a ver la misma imagen varias veces a lo largo de la cinta, no es algo que todo el mundo considere que vale el precio de la entrada. Como decíamos antes, quizás para los espectadores de un festival de video experimental como Traverse, las escenas de personas paradas con sábanas serían bien recibidas y entendidas.

Por eso, desde el punto de vista de cine tradicional, ésta cinta puede no llegar a convencer. 

Desde el punto de vista de cine experimentar, o de cine entendido como obra de arte contemporáneo y arriesgado, donde lo importante es la transmisión de sentimientos, sin pensar en la lógica que hay entre ellos, entonces esta cita es formidable. 

La película participará en muchísimos festivales, entre ellos el de la mostra de Valencia 2020, festival Márgenes, etc, etc, etc.